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No podemos negar que vivimos en una situación compleja, donde millones de personas se enfrentan a crisis y problemas que afectan sus diferentes niveles y áreas de vida. Ahora más que nunca se necesita de líderes que puedan  animar y dirigir a las personas y sobre todo a las organizaciones.

Líderes.

Los líderes ocupan un papel altamente importante en la sociedad, basta con recordar a aquellas personalidades que movieron al mundo. Millones de personas los siguieron, apoyaron y confiaron sin dudar.

Ahora más que nunca necesitamos recordar esa fuerza y creer en aquellas personas que buscan el bien común y la prosperidad en nuestras acciones y decisiones. Debemos recordar que las épocas difíciles son una oportunidad para poner a prueba el liderazgo.

Los últimos acontecimientos mundiales han dejado en evidencia a aquellas personas que mueven y motivan a la sociedad. Y no solo hablamos de los líderes mundiales como presidentes y personas con altos puestos en la política, sino que hablamos de empresarios, estudiantes o personas que han encontrado el verdadero significado de lucha y vida.

Vivimos en una de las más grandes crisis de confianza, donde no hay dirección, no hay verdad y se temen de frustraciones económicas y políticas. Ahora es el momento de que las personas muestren su carisma, ayuden a entender emociones, creencias y puedan apoyar a las personas que se sientan perdidas o temerosas.

Debemos recordar como el hombre a lo largo de la historia ha vivido momentos difíciles y peligrosos, y sin embargo ha encontrado soluciones que les permiten crecer, mejorar y evolucionar.

Las empresas se encuentran en una situación de vida o muerte. Llegó el momento de dejar de temer, llegó el momento de empezar a alzar la voz, encontrar soluciones y proponer estrategias que permitan que millones de empresas evolucionen sus modelos de negocios para así adaptarse a las nuevas necesidades del mundo.

Existen herramientas que pueden ayudarnos a encontrar nuevos estilos de negocio. La tecnología nos ha permitido adaptarnos y encontrar nuevas formas de comunicación. Los jefes de empresas se enfrentan a nuevos riesgo, nuevas situaciones que cuestionan su capacidad de respuesta a la nueva realidad.

Muchas veces no se encontrarán soluciones pero sí fortaleza. Debemos ser realistas pero no pesimistas, debemos apoyar a otros para que nadie pierda la fe, nadie pierda la esperanza de vivir no como antes, sino mejor que antes.

La época de los líderes llegó, el momento de cambiar la historia de las empresas, su funcionamiento y su aplicación está aquí todos los días con nosotros. No solo debemos reflexionar sobre todo lo que hicimos, sobre todas las situaciones que nos llevaron hasta aquí , sino debemos reflexionar en las nuevas oportunidades, caminos y respuestas que el mundo nos ofrece.

Escalamos más en este mundo digital, somos más fuertes y conscientes de lo que vivimos y esperamos. Las empresas deben continuar, deben de encontrar ventanas si sus puertas se han cerrado.